Arrepentimientos

"Personaje nevedesco" Bronce J.Lillo Galiani

«Personaje nevedesco»
Bronce
J.Lillo Galiani

En italiano “petimenti”, así llamados en arte los cambios que los artistas han llevado a cabo sobre sus lienzos para modificar algo que, o sobre la marcha o una vez finalizada la obra, no les dejaba satisfechos. Podía tratarse de pequeños desplazamientos de los trazos para modificar posturas, ligeros cambios de perspectiva, rectificación de proporciones o formas, desaparición de objetos y otros detalles.
No es corriente que las modificaciones aparezcan ya al terminar el trabajo pues, en el caso del óleo y al ser un medio opaco, no son visibles. Aún así, es muy evidente el arrepentimiento a primera vista en el lienzo La cena de Antonio López. En dicha pintura, la cabeza de la mujer del artista se ve notablemente desfigurada al corregir éste su posición. Con el paso del tiempo la fue dejando y así ha quedado de manera permanente. Sin embargo lo normal es que estas rectificaciones aparezcan tiempo después por degradación (sobre todo el aceite de linaza) de las capas superficiales, dejando visible la pintura primigenia. En otras ocasiones no se aprecian hasta que son empleados procedimientos tecnológicos avanzados, como los rayos X o infrarrojos.
El pequeño y misterioso lienzo La tempestad de Giorgione (1478-1510 ), muestra una madre desnuda con su bebé; muy cerca un soldado permanece apoyado en una especie de asta o vara. Las observaciones infrarrojas permitieron descubrir bajo el soldado otra mujer con los pies en un arroyo.
Muy conocidos son los arrepentimientos de Velázquez. En el retrato de Felipe IV a caballo, pueden observarse en el bigote y, sobre todo, en las patas del caballo que parece tener cuatro traseras. También en su lienzo El bufón Calabacilla, se observa ligeras modificaciones en el tamaño y posición de la calabaza.
Bajo el Retrato de Jovellanos, de Goya, se descubrió, por reflectografía, el rostro de una joven desconocida.
Estos estudios aportan muchos datos sobre la forma de trabajar del artista y, muy importante, desvelar falsificaciones.
En el campo de la escultura también se han dado los arrepentimientos, lógicamente, más difíciles de descubrir en la obra definitiva, no obstante son famosos los que llevó a cabo Miguel Ángel en su Moisés, en el que retocó una rodilla y la cabeza.