Resina de poliéster y fibra de vidrio

Estos materiales modernos se comenzaron a utilizar por la industria a mediados del siglo pasado. A lo largo de los años han sido muy comunes en la fabricación de embarcaciones ligeras, en

"Gavilanes" Acero forjado J. Lillo Galiani

«Gavilanes»
Acero forjado
J. Lillo Galiani

aeronáutica y para tuberías y depósitos de agua ya que es un material resistente a la humedad.
La resina de poliéster es un liquido pegajoso e inflamable que se obtiene por la polimerización de productos químicos procedentes del petróleo y que endurece mediante la adición de un catalizador. La fibra de vidrio se fabrica con sílice o vidrios especiales. Tras la obtención industrial de finos hilos se entretejen formando seda, manta o lana de vidrio. En la actualidad se está sustituyendo por la fibra de carbono, mas resistente.
Además de su empleo en los campos ya citados, estos materiales también pueden utilizarse en escultura. Una vez preparado adecuadamente el molde, obtenido de un modelado en barro, éste se impregna de resina catalizada a brocha o pistola. Seguidamente se coloca la fibra de vidrio y vuelve a darse resina. Así, sucesivamente en capas alternativas hasta alcanzar el grosor deseado que suele ser de varios milímetros. Debe trabajarse dentro del tiempo de fraguado de la resina. De esta manera se obtienen esculturas huecas y de poco peso a las que puede darse color una vez terminadas. Se emplean estos materiales en la realización de figuras de gran tamaño que representan personajes famosos de dibujos animados, colocadas en parques temáticos o de atracciones, sin valor artístico aunque son muy llamativas.
A la resina de poliéster catalizada se le puede añadir y mezclar una carga de mármol en polvo, obteniendo un material duro parecido en el color y textura al mármol natural aunque , como el las figuras de fibra de vidrio, acaban policromándose. Este material se ha extendido mucho con la fabricación de millones de figurillas de pequeño tamaño con temáticas tan variadas como animales de todas las especies habidas y por haber, figuras religiosas y personajes y personajillos de todo tipo; adaptados a las características de los países importadores. Proceden principalmente de china y, desde algunos céntimos a varios euros, pueden adquirirse, precisamente, en una tienda de chinos. Igualmente, carecen de valor artístico y están vulgarizados porque de un solo modelo, mediante molde de silicona, se obtienen millares de copias. Han sustituido a las tallas en madera y figuras de cerámica. Se identifican fácilmente observando la base en la que se aprecia el rayado uniforme y paralelo producido por la banda mecánica de lija que se utiliza para eliminar las burbujas del moldeo y aplanar dicha base.
Y como sobre gustos no hay nada escrito, pueden observarse, en pequeños jardines domésticos, la encantadora familia de enanitos con Blancanieves, los despreocupados, musicales y cantarines cerditos o el enternecedor Bambi; haciendo las delicias de pequeños y , sobre todo, de mayores.