Asquerosos trozos de carne

En noviembre de 2013 la noticia saltaba a los medios especializados y en general. La obra del artista se había subastado en la casa Christie´s del Rockefeller Center de Nueva York,  llegando a la cifra récord de 142 millones de dólares, impuestos incluidos. La subasta de la obra, con un precio de salida de 80 millones de dólares, quedó resuelta en seis minutos. El comprador anónimo pujó, como suele hacerse en estos casos, por teléfono. La obra se puso a la cabeza de las la más caras en una subasta. Entró a formar parte de las obras de más precio jamás vendidas pero sin alcanzar la cifra récord de Los jugadores de cartas del impresionista Paul Cézanne que, al parecer fue vendida a la casa real de Catar por 300 millones de dólares. Se trataba del tríptico que el pintor había dedicado a su amigo, el también famoso pintor, Lucian Freud, nieto del médico neurólogo austríaco.
Francis Bacon nació en Irlanda en octubre de 1909, aunque se le considera inglés porque casi toda su vida residió en Londres y allí llevo a cabo toda su producción pictórica. Su padre entrenaba caballos en Dublín pero a causa de la Primera Guerra Mundial se traslada con su familia a Londres donde ingresa en la Ward Office. En estos años, hasta 1925, viven entre Inglaterra e Irlanda. Estos traslados y una afección asmática del muchacho le impiden asistir con regularidad a la escuela. En 1926, y al parecer por su homosexualidad, es expulsado de la casa por el padre y se marcha a   Londres. Viaja a Berlín, permanece casi dos años en Francia y vuelve definitivamente a Londres. Comienza a ganarse la vida como decorador de interiores. En el terreno pictórico, comienza de manera casi autodidacta. Apenas se sabe de sus primeras obras puesto que el artista destruyó gran parte de la mismas. En 1936 le son rechazados los cuadros que presentó en la Exposición Surrealista. Abandona este movimiento de lo onírico y lleva a cabo obras que le asocian con los pintores ingleses figurativos, Graham Sutherland, Matthew Smith y el escultor Henry Moore. Coincide con ellos en algunas colectivas pero su fuerte individualismo le lleva a reafirmarse en sus propias obras. En 1953 lleva a cabo una exposición individual en Nueva York, con la que comienza su proyección internacional. Al año siguiente es seleccionada su obra para el pabellón británico en la Bienal de Venecia, junto a su amigo Lucian Freud. Hacia los sesenta su pintura adquiere una madurez definitiva. Pinta a sus amigos íntimos, a los de su entorno mas cercano: Lucian Freud, Henrietta Moraes, George Dier y otros.
En la ejecución de la figura humana, su tema favorito, la carne aparece magullada herida, sangrante, aplastada o en tensión. Lleva a cabo distintas versiones del Buey desollado de Rembrandt, así como múltiples cuadros basados en el del Papa Inocencio X de Velázquez. Utiliza las fotografías del artista Eadweard Muybridge, y a partir de ellas crea abrazos amorosos, homosexuales y de orgía, lejos de apetencias morbosas sino desde un punto de vista positivista que marca fuertemente su estilo. La primera ministra inglesa Margaret Thatcher, entendida en arte y compradora de pintura, calificó su obra, desde su particular punto de vista, como “asquerosos trozos de carne”.
La vida sentimental de Bacon fue complicada y tormentosa, tuvo tres compañeros o amantes. Los dos primeros se suicidaron con alcohol, drogas o barbitúricos, el tercero recibió toda su herencia. Gustaba de visitar el Museo del Prado y en una de sus frecuentes visitas, murió en Madrid en abril de 1992.

En noviembre de 2013 la noticia saltaba a los medios especializados y en general. La obra del artista se había subastado en la casa Christie´s del Rockefeller Center de Nueva York,  llegando a la cifra récord de 142 millones de dólares, impuestos incluidos. La subasta de la obra, con un precio de salida de 80 millones de dólares, quedó resuelta en seis minutos. El comprador anónimo pujó, como suele hacerse en estos casos, por teléfono. La obra se puso a la cabeza de las la más caras en una subasta. Entró a formar parte de las obras de más precio jamás vendidas pero sin alcanzar la cifra récord de Los jugadores de cartas del impresionista Paul Cézanne que, al parecer fue vendida a la casa real de Catar por 300 millones de dólares. Se trataba del tríptico que el pintor había dedicado a su amigo, el también famoso pintor, Lucian Freud, nieto del médico neurólogo austríaco.  Francis Bacon nació en Irlanda en octubre de 1909, aunque se le considera inglés porque casi toda su vida residió en Londres y allí llevo a cabo toda su producción pictórica. Su padre entrenaba caballos en Dublín pero a causa de la Primera Guerra Mundial se traslada con su familia a Londres donde ingresa en la Ward Office. En estos años, hasta 1925, viven entre Inglaterra e Irlanda. Estos traslados y una afección asmática del muchacho le impiden asistir con regularidad a la escuela. En 1926, y al parecer por su homosexualidad, es expulsado de la casa por el padre y se marcha a   Londres. Viaja a Berlín, permanece casi dos años en Francia y vuelve definitivamente a Londres. Comienza a ganarse la vida como decorador de interiores. En el terreno pictórico, comienza de manera casi autodidacta. Apenas se sabe de sus primeras obras puesto que el artista destruyó gran parte de la mismas. En 1936 le son rechazados los cuadros que presentó en la Exposición Surrealista. Abandona este movimiento de lo onírico y lleva a cabo obras que le asocian con los pintores ingleses figurativos, Graham Sutherland, Matthew Smith y el escultor Henry Moore. Coincide con ellos en algunas colectivas pero su fuerte individualismo le lleva a reafirmarse en sus propias obras. En 1953 lleva a cabo una exposición individual en Nueva York, con la que comienza su proyección internacional. Al año siguiente es seleccionada su obra para el pabellón británico en la Bienal de Venecia, junto a su amigo Lucian Freud. Hacia los sesenta su pintura adquiere una madurez definitiva. Pinta a sus amigos íntimos, a los de su entorno mas cercano: Lucian Freud, Henrietta Moraes, George Dier y otros.  En la ejecución de la figura humana, su tema favorito, la carne aparece magullada herida, sangrante, aplastada o en tensión. Lleva a cabo distintas versiones del Buey desollado de Rembrandt, así como múltiples cuadros basados en el del Papa Inocencio X de Velázquez. Utiliza las fotografías del artista Eadweard Muybridge, y a partir de ellas crea abrazos amorosos, homosexuales y de orgía, lejos de apetencias morbosas sino desde un punto de vista positivista que marca fuertemente su estilo. La primera ministra inglesa Margaret Thatcher, entendida en arte y compradora de pintura, calificó su obra, desde su particular punto de vista, como “asquerosos trozos de carne”.   La vida sentimental de Bacon fue complicada y tormentosa, tuvo tres compañeros o amantes. Los dos primeros se suicidaron con alcohol, drogas o barbitúricos, el tercero recibió toda su herencia. Gustaba de visitar el Museo del Prado y en una de sus frecuentes visitas, murió en Madrid en abril de 1992.