Enfermedades en la pintura

st1\:*{behavior:url(#ieooui) }

/* Style Definitions */
table.MsoNormalTable
{mso-style-name:»Tabla normal»;
mso-tstyle-rowband-size:0;
mso-tstyle-colband-size:0;
mso-style-noshow:yes;
mso-style-parent:»»;
mso-padding-alt:0cm 5.4pt 0cm 5.4pt;
mso-para-margin:0cm;
mso-para-margin-bottom:.0001pt;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:10.0pt;
font-family:»Times New Roman»;
mso-ansi-language:#0400;
mso-fareast-language:#0400;
mso-bidi-language:#0400;}

En cierta ocasión durante una cena en casa del marqués Benigno de la Vega-Inclán, al observar éste a su amigo, médico, en actitud meditativa, le preguntó cuál era la causa que le tenía absorto. El doctor Gregorio Marañón, que observaba los ángeles de un lienzo de El Greco, Estudio de tres figuras de ángeles, colgado en aquel salón, comentó: “tienen bocio”. El marqués, dado el interés del doctor por el cuadro, se lo regaló. En 1956 al pronunciar Marañón su discurso de ingreso en la Academia de Bellas Artes titulado El greco y Toledo, habló del posible astigmatismo y hasta cierta locura del pintor a juzgar por el colorido de sus cuadros. Después en su libro El greco y Toledo, comenta la teoría, comunicada por Cossío, en la que el Greco pudo tomar como modelos a los enfermos mentales del hospital del Viejo Nuncio. Esta teoría sería rebatida y catalogada como de poca consistencia. Pero ciertamente muchos analistas han descrito o diagnosticado múltiples enfermedades, en personajes representados en los lienzos; con más o menos acierto o fundamento.

Al parecer, Caravaggio en Muchacho con guirnalda de yedra o Baco enfermo se retrató de joven estando en el hospital aquejado de malaria; con aspecto musculoso pero de piel amarillenta y labios descoloridos. En la Madonna Bardi de Botticelli, la mano derecha de la Virgen muestra una inflamación en las articulaciones interfalángicas, indicando artritis reumatoide. Según los expertos, en La Madonna con el clavel de Alberto Durero, se percibe un ensanchamiento anormal del cuello y ojos algo desencajados, indicativos de bocio o hipertiroidismo. El Retrato de Pejeròn de Antonio Moro, retrata a este bufón del Duque de Alba mostrando claramente la parálisis del plexo braquial derecho. Un médico, en La mujer hidrópica deGerarit Dou, observa la muestra de orina de una paciente mayor con insuficiencia cardíaca y, según los estudiosos, se observa en la enferma ascitis, agotamiento y edemas en los pies. La Fornarina, amante y modelo de Rafael, presenta, según descubrieron los analistas, signos decáncer de mama por el abultamiento en el seno izquierdo y linfedema del brazo. Naturalmente en Niño cojo, de Ribera, la deformación del pie derecho del pequeño mendigo es evidente. En sus Capitulaciones matrimoniales, Hogartmuestra un personaje de los representados en el lienzo con una pierna fuertemente vendada, síntoma inequívoco de la gota, enfermedad muy dolorosa y común entre reyes y hombres opulentos. En Las viejas de Goya, éste pinta dos mujeres de edad avanzada, una de ellas presenta, por la deformidad de su nariz y según los estudiosos, sífilis congénita; una enfermedad común en la época del arista. En ocasiones pueden detectarse, sinnecesidad de entendidos, los estados anímicos de ciertos personajes: melancolía, tristeza o, modernamente, depresión. Tiziano y Velázquez evidenciaron el prognatismo de los Austrias, Carlos V, Felipe IV y Carlos II. El genio sevillano, Pintor de Corte del cuarto Felipe, retrata al monarca con indolencia linfática, el labio inferior caído y el mentón muy saliente; no carente de inteligencia pero abúlico. En Las meninas, la enana Mari Bárbola muestra su acondroplasia, y Nicolasito Pertussato, con el pie sobre el perro, padece hipogonadismo; con apariencia de niño y carencia de barba, Nicolasito tiene treinta años. Por último, Edgar Degas en La absenta, muestra una bebedora con síntomas de abstracción o atontamiento. Este licor amarillento, también llamado ajenjo, contiene una sustancia alucinógena. De moda en ciertos ambientes del siglo XIX, causó estragos en muchos artistas del París bohemio.